La situación a la que se enfrenta Kike Osborne, el hijo de Bertín y Fabiola, ahora que es mayor de edad

Hace dieciocho años se vivió un día destacado en la crónica social. El 31 de enero de 2007, Bertín Osborne y Fabiola Martínez se convertían en padres de su primer hijo, que recibió el nombre de Norberto Enrique, pero al cariñosamente se han referido siempre como Kike. El bebé nació con una parálisis cerebral, provocada por la listeriosis que sufrió su madre durante el embarazo, a causa de un alimento que comió. El artista y la modelo han hablado en muchas ocasiones de cómo recibieron su diagnóstico en un principio, y de cómo decidieron volcarse en que su hijo creciese feliz y sano. El joven vive hoy una jornada importante: cumple dieciocho años, y ante él se abre un nuevo panorama.

Así es Kike, el hijo mayor de Bertín y Fabiola, que tiene los gustos de su padre

Gracias a las muchas ocasiones en las que Osborne y Martínez, que siempre han optado por dar visibilidad a su primogénito, han hablado de él públicamente hemos podido conocer mejor cómo es el mayor de los dos hijos de la expareja, que tuvo también a Carlos Osborne, de dieciséis años y muy distinto a su hermano. Del mayor han dicho que es un "maestro de vida" y que han extraído un sinfín de lecciones vitales conforme ha ido creciendo. En un reportaje reciente a tres para la revista ¡Hola!, Fabiola indicaba que tiene "ramalazos" de adolescente.

El andaluz mencionaba en la citada publicación que son muchos los puntos que tiene con él. Además del nombre, padre e hijo comparten gustos y aficiones. "Es exactamente igual que yo", comentaba, señalando que ambos adoran el campo, los caballos, las motos y el fútbol, y que disfruta de los partidos del Real Madrid con su progenitor. "Bueno, y cada vez que entra una mujer guapa a la habitación, ya no mira a nadie más", revelaba entre risas el artista, que definía a Kike como "protagonista".

Los intensos cambios que ha vivido Kike Osborne en los últimos años

El adolescente ha vivido una temporada especialmente intensa en los dos últimos años, como han relatado públicamente su madre. Pensando en esa mayoría de edad que hoy alcanza, sus progenitores comenzaron a tomar decisiones hace un tiempo para preparar a su primogénito de cara a los retos que estaban por llegar. Así, en el verano de 2023, la venezolana anunció que Kike iba a comenzar una nueva etapa y a empezar a hacer cosas nuevas, potenciando en capacidad de expresión de cara a poder acceder a centros donde se le enseñase.

Unos meses después, a finales de año, la colaboradora y escritora revelaba que Kike estaba escolarizado por primera vez tras años de terapia en centros, y que se encontraba en una fase más "rebelde". Supimos también que sus padres querían que la fundación familiar, creada para dar apoyos a las familias con personas con discapacidad, recibiese el nombre de su hijo. Así ocurrió el pasado mes de noviembre, cuando Kike protagonizó su primer acto público y recibió el relevo de su padre en el ente, en el que Bertín y Fabiola quieren que tenga un papel más activo.

La situación de Kike, el hijo de Bertín Osborne, al cumplir los dieciocho años

Con los dieciocho ya cumplidos, Kike abre definitivamente una nueva etapa. Martínez ha asegurado en los últimos meses que "es obvio que no tiene la mente de un chico de 18 años, pero que ya no es ningún bebé". Kike ha ganado en autonomía, y ha superado todas la expectativas respecto al pronóstico que recibieron sus padres, a los que les dijeron que no había "nada que hacer" cuando nació.

Pero pese a los avances y el progreso en estos dieciocho años, tanto Bertín como Fabiola han expresado los miedos ante un horizonte inédito. "En el momento en que él sea mayor de edad, su situación cambia a nivel legal", aseguró ella hace un año y medio. Lo cierto es que la situación de hecho que había mientras era menor, tendrá que tener una cobertura jurídica de alguna manera ahora que es mayor de edad, dependiendo de si el adolescente había sido o no incapacitado judicialmente, en forma de una o una curatela representativa o de medidas de apoyo.

Además, la de Maracaibo revelaba hace unas semanas que Kike acabaría próximamente el colegio y que se enfrentaba a otro panorama, también, en ese sentido. Fabiola reconocía que sus planes podrían pasar por empezar a ir a un centro de día, pero tenía dudas al respecto. "¿Qué oportunidades tendría Kike allí? Me empiezo a enfrentar, como madre, a un montón de incertidumbres por su futuro, que no sé por dónde va a ir"

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