“¡Qué cañón de tío!” Esta fue la reacción de Esperanza Aguirre al reencontrarse con Fernandito, un conocido de la infancia que con el tiempo terminó convirtiéndose en su marido y formó una familia con el nacimiento de sus dos hijos.
Todos ellos se han convertido en una piña desde que ambos dieron positivo en coronavirus la semana pasada. Tras cuatro días ingresados en la madrileña Fundación Jiménez Díaz, el matrimonio ha recibido el alta este lunes después de varios bulos que apuntaban a que la situación no era tan favorable. Este es el árbol genealógico de Aguirre y Martínez de Haro que les apoya ahora que han vuelto a casa.
A Fernando Martínez de Haro y la expresidenta de la Comunidad de Madrid les unió el golf cuando ella aún no se había sacado el carné de conducir. Y así empezó un noviazgo (que al poco se convirtió en matrimonio) en el que llevan embarcados más de 45 años.
Por cosas del destino y de la época, su boda fue conjunta con una de las hermanas de Aguirre. Dos novias, dos novios y cuatro padrinos pasaron por el altar el mismo 1 de septiembre de 1974. Una vida unidos a la que se fueron incorporando sus dos hijos y sus seis nietos.
Dos años después de aquella boda tan bizarra se convirtieron en padres de Fernando, su primer hijo. Tanto él como su hermana siempre han ocupado un segundo plano a pesar de la ola mediática en la que se ha visto envuelta su madre en ciertos picos de su carrera política.
El mayor del clan, que estudió Empresariales en ICADE, dirige Asset Management, una conocida consultora inmobiliaria. Junto a su mujer Carolina de Oriol y Miranda, nieta de Antonio María de Oriol y Urquijo, que fue ministro de Justicia en la época de Franco, formó una familia hace nueve años. Ahora son padres de tres niños.
La nuera de Esperanza, que estudió la misma carrera universitaria que su marido, trabaja en la división de marketing y organización de eventos del banco británico Barclays desde el año 2006.
Álvaro es el segundo y menor de la familia. Llegó al mundo en abril de 1980, cuatro años después que su hermano Fernando. Su camino profesional fue enfocado al Derecho, la misma carrera que estudió su madre en la Universidad Complutense de Madrid.
Tras fichar por el despacho de abogados Pérez-Llorca, Álvaro conoció a la hispanoalemana Astrid Thams y Labayen. Con su boda, que tuvo lugar en junio de 2009, el menor de los Martínez de Haro se convirtió en conde de Villariezo.
Junto a su esposa, hija de Christian H. Thams y de Laura de Labayen y Latorre, el abogado fue formando una familia de tres hijos. Ella también cuenta con un currículum destacable: jefa de los departamentos internacionales de Ágatha Ruiz de la Prada, el Real Madrid y Adidas. Desde el año pasado es directora de retail de la firma de ropa deportiva Fanatics.