Sara Carbonero soplaba este miércoles las velas de su 37 cumpleaños. A pesar de las continuas especulaciones de crisis que sobrevuelan a la periodista y el guardameta en los últimos meses, la pareja continúa con su vida ajena a las informaciones que señalan que su separación es un hecho. “Muchas felicidades. El baile sigue, hay que bailar hasta el final”, silenciaba la polémica Íker a través de un post dedicado a su mujer. Aunque no ha podido celebrarlo a lo grande por las estrictas normas sanitarias establecidas en el país para evitar nuevos contagios, la presentadora sí que ha recibido alguna que otra sorpresa y ha reunido a su entorno más cercano para comer un trozo de su original tarta personalizada.
Después de un día lleno de felicitaciones y regalos, Carbonero colgaba un post en el que agradecía todas las dedicatorias y mensajes recibidos. “Primavera en pleno febrero. 03/02/2021. Muchísimas gracias a todos por tantas felicitaciones y una cantidad de cariño que no sé cómo devolver”, hacía referencia a la gran cantidad de flores con las que posaba y que habría recibido por esta fecha tan especial. “Hoy me decía una buena amiga que hay que celebrar sin mesura, que la vida es una vela soplada y un eterno deseo. Yo tengo muy claro el mío”, confesaba a sus seguidores.
Además de dejarse ver frente al espejo rodeada de globos y con flores impresas hasta en su vestido, la presentadora también mostraba a sus casi 3 millones de admiradores el pastel personalizado que habría degustado con su círculo más cercano. Sara soplaba las velas en una tarta cuadrada compuesta por una fotografía impresa suya en la parte superior y la frase ‘I am brave’ en un lateral, extraída del tema principal de la película ‘El gran showman’ y a la que también hizo referencia en la emotiva carta que escribió a su hermana para agradecerle su fuerza en sus momentos más complicados. "Bienvenidos 37. Gracias, gracias, gracias. Tengo la mejor familia y los mejores amigos del mundo. Dancing Queen", concluía.
Los últimos meses han estado marcados por la polémica para la pareja, que optaba por anclarse en el silencio y no confirmar ni desmentir los continuos rumores de crisis originados tras las declaraciones de Íker admitiendo que “no había estado todo lo que tendría que haber estado al lado de Sara”. Algunas de las pruebas que se ponían sobre la mesa eran las pocas imágenes que compartían juntos en las redes e incluso se señalaba que habían comenzado a hacer vidas separadas desde que volvieron a Madrid acabado el verano.
Sin embargo, la revista ¡Hola! confirmaba en exclusiva este miércoles que ambos continúan viviendo juntos con sus dos hijos en un chalet a las afueras de la capital y no estarían prestando atención a las polémicas que se han creado en torno a su relación. La cabecera citada anteriormente desmentía que Casillas tuviese en mente mudarse al piso que se compró en el centro de Madrid. La realidad es que esa vivienda todavía continúa en obras en la actualidad, ya que la reforma se ha alargado por culpa de la pandemia.