En el año 2018, Camilo le hacía la gran pregunta a su pareja, en una sala de cine y delante de muchos de sus familiares y amigos. Evaluna no lo dudaba, su respuesta era un gran sí, un compromiso que tardó dos años en hacerse efectivo, pues la pareja no sellaba su amor hasta el 8 de febrero de 2020, tras cinco años de relación.
No podían estar más felices, su amor nunca ha sido un secreto y en sus redes sociales, las demostraciones públicas de este hace tiempo que dejaron de ser una novedad. Su enlace estuvo marcado por el romanticismo y también por la sencillez habitual de esta pareja, algo bastante sorprendente, sobre todo teniendo en cuenta el tamaño de la celebración.
Miami fue el lugar escogido por la pareja para jurarse amor eterno, esto hizo que a pesar de ser en el mes de febrero, la novia pudiera lucir un vestido de tirantes finos sin que se lo impidiera el frío. Ambos quisieron que su ceremonia fuera una celebración privada, por lo que los 350 invitados que asistieron eran todos familiares y amigos de la pareja.
Todos ellos pudieron ser testigos del momento en el que Evaluna hacía acto de presencia por el pasillo nupcial, que recorría del brazo de su padre, el compositor y estrella de la música Ricardo Montaner. La emoción del momento era evidente para todos, pero las lágrimas de Camilo al ver acercarse a quien pronto sería su esposa fueron las grandes protagonistas. El músico no podía contener el llanto y muchos de los invitados le acompañaron.
La boda tuvo algunos momentos para el recuerdo, desde el ‘sí, quiero’ de los novios, al baile de Ricardo con su hija. Juntos se movieron al ritmo de ‘Si tuviera que elegir’, la canción que el músico le compuso cuando era pequeña. También se filtró en la redes el momento en el que Camilo cumplía con la tradición y le quitaba la liga a la novia, a pesar de lo mucho que se notaba que era un momento que habría preferido tener en privado con su esposa.
Las risas, la música y la gran complicidad de la pareja se convirtieron en protagonistas de un enlace en el que el novio lució unas flores de algodón en la solapa y la novia lució un look muy acorde con su personalidad. Sencilla y muy natural, llevó el cabello recogido y un maquillaje muy refrescante; escogió un vestido de alta costura, con encaje y escote en V. La falda, cargada de volumen y movimiento, estaba elaborada en tul.
Era el propio Camilo quien compartía una imagen del momento en el que se alejaban del altar, ya convertidos en marido y mujer. Un instante en el que la felicidad de ambos era evidente en sus rostros, los dos luciendo sus sonrisas más radiantes. “Camilo y Evaluna. Para Siempre. ¡La Tribu está completa!”, poco sabía Camilo al escribir estas palabras que la tribu todavía podía sumar más, en abril de 2022, daban la bienvenida a su primera hija, Índigo.