El pasado mes de febrero, tres mujeres -totalmente desconocidas para muchos- se subieron al escenario de los Premios Goya. Ellas cantaron, actuaron y, sobre todo, homenajearon a su madre, Marisol. Muchas eran las dudas sobre si la cantante saldría de su retiro y acudiría a Málaga a recoger tan importante galardón que reconocía su intensa carrera. Pero no fue así. Marisol decidió bajarse de los escenarios hace mucho tiempo, y lo hizo por voluntad propia, para alejarse de todo lo que le había atormentado siendo una artista tan joven. Aún así, sus tres hijas, María, Tamara y Celia, no dudaron en estar ahí por su madre.
Así, fueron parte de ese emotivo homenaje y recordaron, una vez más, la figura de Pepa Flores. Pero, ¿quiénes son ellas? Gracias a su actuación pudimos observar que, al igual que su madre, también tienen dotes en el mundo interpretativo. Eso sí, una de las hermanas, Tamara, siempre ha querido mantenerse al margen del espectáculo y de la vida pública. Pero, ¿a qué dedican su vida María, Tamara y Celia?
Josefa Flores González nació en Málaga hace casi 73 años en una familia malagueña muy humilde y pronto comenzó a interesarse por el cante y el baile flamenco. En el año 1959 fue descubierta por el productor Manuel Goyanes, cuando viajó a Madrid para actuar con un grupo musical al que pertenecía. A partir de ese momento, su vida dio un giro de 180 grados y comenzó a hacerse famosa en todos los rincones del mundo. Además, se hizo conocida con el nombre de ‘Marisol’, que sonaba más armónico. Con tan solo doce años recibió el premio a Mejor Actriz Infantil en la Mostra de Venecia y rodó en la televisión americana. Marisol pasaba largas jornadas de rodaje, sin poder disfrutar verdaderamente de su infancia. Fue en 1985 cuando Marisol no pudo más y decidió retirarse de la vida pública.
Respecto a su vida privada, la primera vez que la cantante pasó por el altar fue en 1969, cuando contrajo matrimonio con el productor Carlos Goyanes, convirtiéndose en la pareja de moda. Aunque tres años después tomaron caminos por separado debido a la complicada vida de Marisol, con la que ella misma no estaba a gusto, y por los problemas en su matrimonio. Su gran amor sería el bailaor Antonio Gades, con quien comenzó a salir en 1973. Fue con él con quien tuvo a sus tres hijas: María, que nació 1974; Tamara, que vino al mundo en 1976 y, por último, Celia, que nació en 1981. Un año más tarde, la pareja celebró su boda en Cuba y contaron con Fidel Castro como padrino.
Seis años después el matrimonio se rompió, ya que Antonio se enamoró de otra mujer. En 1988, Marisol conoció al italiano Massimo Stecchini, quien apareció en uno de sus momentos más decisivos, cuando decidió dejar su faceta interpretativa y musical. Pepa y Massimo mantienen una relación más que consolidada que llega hasta la actualidad y viven entre su casa de La Malagueta y una finca que tienen a las afueras de la ciudad malagueña.
A pesar de los complicados momentos, Pepa siempre ha contado con el apoyo de sus tres hijas. La mayor, María, vino al mundo en Mar de Plata, Argentina, y pronto decidió que quería dedicarse al mundo de la actuación, como su madre.
Con 22 años debutó en el cine en la película Más que amor frenesí y, a partir de ese momento, comenzó a aparecer en pequeños papeles. Aunque, sin duda, su gran oportunidad le llegó en el año 2002 de la mano del director Emilio Martínez Lázaro y su película musical El otro lado de la cama. En este film, María enseñó al mundo sus dotes como bailarina y cantante junto a otros intérpretes de la talla de Paz Vega o Ernesto Alterio.
María se ha formado en España e Italia para conseguir ser una artista polifacética. A pesar de ello, en el 2008, María se planteó dejar la interpretación y terminar un máster de Gestión Cultural para poder dirigir la fundación y compañía de danza que lleva el nombre de su padre, quien falleció en el 2004.
La segunda hija de Marisol, Tamara, es la gran desconocida. Estudió Psicología en la Universidad de Málaga y, también, se licenció en Administración y Gestión de Recursos Humanos. Además, es madre de una niña que se llama Alejandra y que es el ojito derecho de su abuela. Tamara trabajó como responsable de RRHH de un conocido supermercado en el barrio de Vecindario, en Gran Canaria. Desde hace más de nueve años, la hija mediana de Marisol es coordinadora provincial de la ONG Fundación Secretariado Gitano en Málaga, donde dirige diversos proyectos sociales.
Celia, la más pequeña de las hermanas, es quien más ha heredado la esencia de Marisol. En el año 2006 sacó su primer disco al mercado y, cuatro años más tarde, salía su primer trabajo, llamado En una calle blanca. Además, ha formado parte de uno de sus proyectos más especiales: un disco homenaje a su madre, 20 años de Marisol a Pepa Flores, donde interpretaba algunos temas.