Norma Duval fue una de las vedettes que siempre quedarán para el recuerdo. Purificación Martín, su verdadero nombre, se convirtió en una mujer rompedora, a la que no le importó lo que la gente dijera de ella y a la que le gustaba gustar. Es por eso que se convirtió en toda una rompecorazones. Fue elegida Miss Madrid en el año 1973, lo que le sirvió para comenzar a hacer sus primeros pinitos en el mundo de la interpretación y darse a conocer. Más tarde dio el salto a la televisión y, luego, a las revistas.
En el amor tampoco le iba mal. En 1981 mantuvo un romance con Jorge García Lago, con quien llegó a prometerse. Sin embargo, la familia del joven se opuso a la boda y denunciaron a Norma por allanamiento de morada cuando ella se instaló en el piso de su novio. A los dos años, la vedette comenzó una relación con el exjugador de baloncesto Marc Ostecevic con quien tuvo a tres hijos: Marc Iván, Yelko y Christian.
Fueron muchas las exclusivas que Norma Duval dio en las que siempre estuvo acompañada por sus hijos. Así, juntos se mostraban sonrientes, posando en bañador o disfrutando de las vacaciones en cualquier parte del mundo. Eso sí, una vez que crecieron, ellos mismos se dieron cuenta que su lugar no estaba frente a los focos, y decidieron alejarse de ese mundo y labrarse un futuro laboral por otros derroteros.
Marc, el mayor, nació en 1984 y se convirtió hace más de nueve años en padre primerizo. El joven está casado con Patricia, con quien Norma mantiene una estupenda relación. Con su hermano Yelko, además de tener una buenísima relación, le unen lazos empresariales, ya que ambos son administradores solidarios de un servicio sanitario llamado Crymayel Desinfecciones S.L., una empresa madrileña que se dedica a eliminar las plagas de ratones, cucarachas e, incluso, la legionela.
Los tres hijos de Norma Duval estudiaron en el prestigioso colegio San José de Madrid y la poca diferencia de edad entre los tres ha hecho que sean inseparables. También, Yelko se ha intentado mantener en un segundo plano, aunque sí que es cierto que allá por 2011, tanto él como su madre concedieron un posado donde se les veía disfrutar de sus vacaciones.
Por su parte, al pequeño de los hermanos, Christian, sí que le ha gustado más trabajar frente a los focos. El joven ejerció, durante unos años, de modelo de pasarela, aunque pronto decidió dar un giro a su vida. Así, se convirtió en monitor de un club de pádel en La Moraleja, donde se hace cargo de más de 60 alumnos. Lejos de arrepentirse de haber dejado el mundo de la moda, Christian siempre se ha mostrado encantado con el rumbo profesional que ha tomado su vida.
Marc y Norma se separaron en octubre de 2001 y consiguieron el divorcio dos años más tarde. Aunque, por aquella época sus hijos eran todavía muy jóvenes, parece ser que la relación con Marc es casi inexistente. En una entrevista que concedió toda la familia, Norma explicó que el único que mantenía algún tipo de contacto con su padre era Yelko.
Tras su divorcio, Norma se casó con el productor José Frade, del que también acabó separándose. Desde el año 2010 mantiene una relación con el agente inmobiliario Matthias Kühn, con el que también ha protagonizado algunas idas y venidas.