¿Cuándo es necesaria la rehabilitación del suelo pélvico tras el parto?

Sabemos que el embarazo implica una serie de cambios significativos en el cuerpo de la mujer y que, tras el parto, es cuestión de tiempo que vuelva a su estado anterior. El suelo pélvico es una de las zonas más afectadas y, en ocasiones, es necesario rehabilitarlo una vez terminado el embarazo. El suelo pélvico es un conjunto de músculos situados en la pelvis que sostienen, entre otros órganos, los intestino, el útero, el recto y la vejiga. Que estos músculos recuperen el tono es esencial para que estos órganos vuelvan a su sitio y puedan realizar sus funciones con total normalidad. 

Por lo tanto, es necesario prestar atención al estado en el que el suelo pélvico, que se ha distendido enormemente durante el embarazo, queda tras el parto. Te contamos cuándo debes fijarte en cómo está y qué debes hacer para que vuelva a recuperar su tono. 

Cuándo evaluar el suelo pélvico

Nada más producirse el parto es imposible que el cuerpo vuelva a su sitio, ya que esto es algo que irá ocurriendo a lo largo de las semanas y meses siguientes. De hecho, el mejor momento para saber cuál es la realidad del estado de nuestro suelo pélvico es a partir de la cuarta semana tras el parto. También es en este momento cuando se puede hablar de la posibilidad de una rehabilitación. Sin embargo, y aunque no se pueda saber con certeza cuál va a ser la evolución natural, sí es cierto que si antes del embarazo la mujer contaba con una musculatura fuerte en la zona, es más fácil que la recuperación sea favorable. 

Sea cual sea tu situación, también es posible comenzar a trabajar la zona en el postparto inmediato, es decir, a partir de las 48 horas del parto. Los ejercicios de Kegel, de los que habrás oído hablar en más de una ocasión, son muy sencillos e ideales para trabajar el suelo pélvico. Solo necesitas unos minutos al día para evitar las pérdidas de orina y tener un mejor control intestinal. Eso sí, si ha habido una distensión excesiva de la musculatura, puede que no sean suficientes. 

Cómo rehabilitar el suelo pélvico

Cuando tras el parto hay una distensión en la musculatura pélvica que produce pérdidas de orina, molestias al tener relaciones sexuales o molestias lumbares, es necesario acudir a un fisioterapeuta experto en este campo. Mediante masajes, ejercicios específicos y otras indicaciones que valore el profesional, en cuestión de pocos meses puede volver a fortalecer tu suelo pélvico. Además, aunque es cierto que cuanto antes empieces la rehabilitación, antes verás los resultados, que haya pasado mucho tiempo desde el parto no es un impedimento para que puedas comenzar a trabajar esa zona del cuerpo y mejorar tu vida y salud.