Dieciocho meses después del nacimiento de Ana Sandra, Ana Obregón nos sigue enseñando orgullosa cómo crece la hija póstuma de Aless Lequio. A través de las redes sociales, donde alcanza más de un millón de seguidores, la actriz explica que ha vuelto a nacer con el nacimiento de su nieta y que, gracias a esa "última voluntad de su hijo", ella ha podido resucitar su corazón. Cuando Anita sea más mayor, igual que le hicieron a la madre de Ana Obregón, la presentadora le contará cómo se gestó su nacimiento y le enseñará "a ser valiente". "Como fue tu papá luchando para sobrevivir con una sonrisa. Amándote y cuidándote honro a tu papá", escribía ella misma a través de sus redes sociales.
Ahora, con la llegada del otoño, Ana Obregón ha compartido nuevas imágenes junto a su nieta. En las fotografías se puede ver a la actriz, vestida con un chándal de color rojo, disfrutar sentada en el césped de las risas y ocurrencias que hace su nieta, que va vestida con un conjunto de color rosa. Ambas posan sonrientes ante la cámara mientras juegan con las hojas secas de los árboles de su jardín.
En este carrusel de imágenes, Ana Obregón también ha compartido una fotografía de Aless Lequio de pequeño para demostrar que su nieta es "una copia" de su hijo. La realidad es que, desde que Anita llegó al mundo, además de la actriz, otros familiares también han comentado el gran parecido físico que la menor guarda con Aless Lequio.
Cuando Ana Sandra cumplió su primer año de vida - el pasado mes de marzo - la familia Obregón se reunió para celebrarlo. Celia Obregón comentó ese día a los compañeros de Europa Press que la pequeña Anita es "una muñeca" y que veían en ella "el vivo retrato de Aless". "Es acojonante, de verdad, pero igual. No solamente gestos, sino que además físicamente se parece un montón. Una monada. La veo todos los días y cada día es un buen invento. Es muy cariñosa, muy divertida y muy grande, porque para la edad que tiene está gigante. Se me cae la baba", confesó entonces la hermana de Ana Obregón.
Juancho, otro de los hermanos Obregón, también dijo aquel día que la niña era "guapísima y adorable" y que se había quedado "impresionado" porque mirar a Anita era "ver a Aless". "Es sorprendente, son muy parecidos", aseguró.