Tras nueve meses de embarazo, la recta final se hace muy larga, especialmente para las madres primerizas. El parto se produce, cuando ha llegado a término, entre la semana 38 y la 42 aproximadamente. La futura mamá debe, hasta que nace el bebé, cuidarse con una buena alimentación y haciendo ejercicio moderado. Pero es muy común interesarse por métodos naturales que aceleren el momento del parto, y uno de los más populares es ingerir determinados alimentos. Te contamos cuáles son estos alimentos y si es cierto que ayudan a inducir el parto en la recta final del embarazo.
Lo cierto es que no hay nada que apunte a que el consumo de chocolate puede ayudar a inducir el parto. Sí es verdad que, al contener algo de cafeína, si se toma en un estado avanzado de embarazo puede estimular al bebé a moverse, y que eso nos haga pensar que puede animarlo a comenzar el trabajo de parto.
Tomar piña fresca, ya sea en rodajas o en zumo, es un de los “trucos” más populares de las madres para acelerar el parto. La piña contiene bromelina, una enzima que parece funcionar de la misma manera que la prostaglandina, y que suaviza y hace madurar el cuello uterino.
Las infusiones siempre se encuentran en los listados de remedios naturales de todo tipo por su gran variedad de propiedades. Cuando se habla de embarazo, el té de frambuesa es el favorito de las madres porque, al parecer, tiene un efecto estimulante en el útero y podría hacer que se desencadenase el trabajo de parto.
El ajo ofrece muchísimos beneficios para la salud, como ser antibacteriano, reducir el colesterol malo o mejorar la circulación sanguínea. Que forme parte de este listado es por otra de sus propiedades: estimular los intestinos. Se piensa que al ayudar a vaciarlos deja espacio suficiente para que el bebé descienda por el canal del parto.
Con el regaliz ocurre algo parecido al ajo. Contiene glicirricina, un ácido con propiedades medicinales muy interesantes, como aliviar la tos seca, tratar infecciones bucales o reducir la hipotensión arterial. A las embarazadas les interesa su efecto laxante y los retortijones que causa en el intestino, por si pudieran inducir las contracciones de parto, pero lo cierto es que no conviene abusar en su consumo.
Si te gusta el picante y estás embarazada es muy posible que te hayas preguntado si puedes seguir tomándolo durante la gestación. Lo cierto es que no hay ninguna contraindicación, a menos que te cause reflujo o malestar estomacal. En cuanto a su poder para inducir el parto, va en la misma línea de otros alimentos ya mencionados: provoca movimientos intestinales, y se cree que esto ayuda a que se produzcan contracciones uterinas.
Aunque sabemos que si estás en la recta final de embarazo te encantaría leer que estos remedios funcionan, lo cierto es que no hay nada que lo demuestre. Si quieres incluirlos en tu dieta, adelante. A menos que tu médico (al que debes consultar) te diga lo contrario, son todos buenos alimentos y tomados con moderación formarían parte de una dieta saludable. Lo más importante ya lo sabes: cuídate en todos los aspectos, porque el momento del parto va a llegar, tomes o no estos alimentos.