Las tendencias parece que cada vez surgen y desaparecen más rápido, un hecho que sin duda se acelera debido a la presencia de las redes sociales, donde de un día para otro, una prenda determinada parece convertirse en el nuevo imprescindible de las celebrities y expertas en moda. Esto precisamente es lo que ha sucedido con los vestidos que incluyen lazos XL, una pieza que hace varias temporadas con el auge del ‘athleisure’ y el ‘normcore’ era impensable que fuese tan popular y que parece que ahora se ha hecho con el protagonismo en el Street Style.
Más allá de resultar demasiado pomposos, este tipo de diseños tienen como distintivo una gran lazada en la parte delantera o trasera que le aporta un toque de sofisticación y feminidad hasta a los patrones más sencillos. Una corriente a la que se han sumado últimamente firmas como Burberry, Carolina Herrera, Valentino, Nina Ricci o sellos ‘made in Spain’ centrados en prendas de invitada como por ejemplo Inés Martín Alcalde.
Sin embargo, para lucirlos y que el look no se vea recargado, habría que tener en cuenta ciertos factores que se detallan a continuación.
En primer lugar, la confianza, sin duda lo más importante al lucir un vestido con un lazo XL. La moda se trata de expresar tu personalidad y sentirte bien contigo misma, por lo que, si te sientes cómoda y segura con lo que llevas puesto, eso se reflejará en tu actitud y estilo.
Dicho esto, para acertar habría que tener en cuenta el tipo de cuerpo que se tiene para dar con el patrón más favorecedor. Por ejemplo, los modelos con cintura ajustada y falda acampanada suelen ser una elección favorecedora para la mayoría de las siluetas. Además, ten en cuenta el color y el estampado del vestido para asegurarte de que se adapte a tu tono de piel y sello personal.
La clave para lucir un vestido con lazos XL es asegurarse de que el lazo esté bien ajustado. Si está demasiado holgado, puede parecer descuidado, mientras que si está muy apretado, puede crear una apariencia incómoda. Prueba diferentes formas de atar el lazo y encuentra la que se adapte mejor a tu estilo y preferencias.
Dado que el lazo es el punto focal del estilismo, es importante equilibrar el resto del atuendo. Opta por accesorios más simples y discretos para no distraer la atención. Un par de pendientes pequeños y delicados, junto con pulseras o anillos sutiles, lo complementarán sin competir con él. Al elegir un bolso o clutch para rematar el outfit, considera el tamaño y el estilo del vestido. Opta por un bolso de mano o una cartera pequeña para eventos formales, mientras que para salidas informales puedes optar por bolsito de hombro algo más casual.
Lo mismo sucede con el calzado, un elemento determinante a la hora de lograr el resultado final. Las que busquen un extra de elegancia encontrarán en los tacones altos o sandalias de tiras un aliado perfecto mientras que para el día a día con unas zapatillas blancas o unas bailarinas el resultado es perfecto.
Si necesitas añadir una chaqueta, lo más adecuado es que sea discreta, con un corte sencillo y que en ningún momento deforme el lazo. Si quieres añadir un toque más divertido al look puedes optar por un tono que contraste o un tejido llamativo (como por ejemplo la seda o el satén) que harán que resalte todavía más.
Un último apunte. En los estilismos de invitada encaja a la perfección con recogidos y un maquillaje natural para que el lazo se convierta en el verdadero protagonista.
Y recuerda, sigue siempre la premisa de que los accesorios agreguen un toque de elegancia sin abrumar el conjunto final para un resultado de diez.