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Con la entrada de la primavera llega el momento de cambiar la paleta de color de la ropa con la que te vistes. Dejar de lado los kakis y marrones, que han sido tendencia durante el otoño-invierno, y dar la bienvenida a tonos más brillantes y divertidos.
Las diferentes pasarelas dictaron sus propuestas sobre 3 preferencias. Por un lado, colores vibrantes protagonizados por tonos cálidos como el naranja, el amarillo y el rojo, a los que se suma el bautizado como very peri; por otro una serie de tonalidades empolvadas dominadas por el rosa y algunos tonos fríos; finalmente, una clara predilección por dos neutros opuestos en looks monocromáticos: el blanco y el negro.
Esta amplia paleta de tonos y colores que proponen las pasarelas de primavera-verano, es fiel reflejo de una sociedad que invita a cada persona a expresar su individualidad y a buscar y manifestar su identidad a través de la moda y las tendencias.
El color naranja repite en el pódium de las tendencias esta temporada. Firmas como Missoni, Saint Laurent y Max Mara apuestan por su versión más saturada y lo hacen en clave total look, aunque puedes rebajar tanta vitamina combinándolo con tonalidades neutras o duplicar su energía si lo sumas a otros tonos tan intensos y cálidos como el rojo o el fucsia.
El amarillo es otro tono vitamina que vuelve a ser protagonista esta primavera-verano, según proponen Richard Queen, Etro y Valentino. Este tono optimista y especialmente favorecedor cuando la piel está bronceada también llegó a las pasarelas en solitario, pero del mismo modo que el naranja se puede potenciar o rebajar su intensidad dependiendo de con qué colores se combine.
El rojo llevaba demasiado tiempo alejado de las tendencias y esta primavera-verano vuelve al lugar que le corresponde entre los tonos más repetidos en la pasarela en versiones tan dispares como las que proponen Naeem Khan, Carolina Herrera y Loewe. Romántico, femenino y poderoso, necesita pocas florituras para ser el centro de atención, por eso ofrece una de sus mejores versiones cuando aparece en total look.
El bautizado como very peri fue elegido por Pantone color del año 2022, un color que conocen bien los aficionados a los videojuegos y que combina el azul con el lavanda. Propuesto en pasarela por firmas como Valentino, Missoni y Ermanno Scervino, se revela como la alternativa a los clásicos tonos fríos que dominaron otras temporadas.
Aunque el fucsia va a seguir llenando las calles, esta primavera-verano tiene un serio competidor en el rosa chicle, un tono dulce al que han regalado metros de pasarela Michael Kors, David Koma y especialmente Carolina Herrera, aunque parece que su reinado se extenderá hasta el próximo otoño-invierno según las últimas propuestas de Valentino.
Tonos empolvados de verde y azul también han llenado la pasarela, aunque la premisa de firmas como Ermanno Scervino, Michael Kors y Ottolinger es sacarlos de la clásica candidez alejándolos de los vestidos baby-doll y fusionarlos con ropa más atrevida: tejidos semitransparentes, prendas de corte masculino e incluso mediante el uso de patrones desestructurados.
Esta primavera-verano tampoco saldremos del verde en casi todas sus tonalidades: verde croma, verde hoja, verde pistacho, verde musgo, verde laurel y verde menta vuelven esta temporada de la mano de firmas como Acne Studios, Missoni y Stella McCartney. Combinado con otros colores vibrantes o apostando por la monocromía, promete seguir llenando las calles con su optimista mensaje eco.
Si hay un color que está asociado de manera indisoluble al verano y a las playas, ese es sin duda el blanco, que esta temporada llega en clave total look de la mano de Giambattista Valli, Koche y Chloe. Sus propuestas se alejan del ‘modo Ibiza’ para hacer del color blanco una apuesta más sofisticada y urbana.
En cuanto al negro, un color poco o nada previsible para la temporada de primavera-verano, se ha convertido en una de las opciones más apetecibles para esta temporada. Tiene algunos de sus mayores defensores en Ann Demeulemeester, Courreges y Max Mara, cuyas creaciones no pierden un ápice de frescura a pesar de estar inmersas en la mayor de las oscuridades.
Los divertidos acabados satinados y metalizados se han convertido en la respuesta masiva que han tenido los diseñadores a los años de aletargamiento a los que se vieron arrastrados por la pandemia. Tejidos que gritan fiesta y diversión y que, como demuestran Rochas, Dolce & Gabbana y Versace, resultan adecuados con independencia del color que elijas como tu favorito de la temporada.