Están a punto de cumplirse dos meses de aquel acto histórico en la que Tamara Falcó verbalizó ese "ni un nanosegundo en el metaverso" con el que recreó su última conversación con Íñigo Onieva. Dos días después de anunciar públicamente su compromiso, su relación se rompió para siempre cuando él reconoció haberle sido infiel tras negarlo a bombo y platillo (a pesar de existir documentos gráficos que así lo confirmaban). Un tiempo prudencial en el que la marquesa de Griñón ha podido analizarlo todo con perspectiva para poder compartirlo con los medios en su esperada reaparición pública.
La presentación de su segunda colección para Pedro del Hierro ha permitido que la prensa se reencuentre con Tamara. Mucho más tranquila después de pasárselo "pipa" en un viaje a Doha con su hermana Ana Boyer, Falcó asegura estar "bien" dentro de las circunstancias. "Ha habido momentos, pero ya ha pasado un tiempo. He estado de concierto, era la primera vez que bailaba… He salido a cenar, he tenido la boda de mi mejor amiga, no iba a estar sentada en una silla. Esto es raro, va y viene", ha expresado con sinceridad.
"Evidentemente he llorado, he tenido momentos malos, había momentos en los que no sabía muy bien qué había sucedido", ha asumido. Pero el paso de los días y "la ayuda de la Virgen", a la que se acercó a través de un retiro en Lourdes en el que sintió "una fuerza" que no era suya, lo peor ha pasado más rápido de lo que ella y su entorno esperaban.
Aunque muchos crean que separarse y anular su boda ha supuesto un cambio radical en su vida, la aristócrata lo desmiente. "Tenía una vida estupenda y no tengo por qué cambiarla. A mí mi vida me encantaba y no está definida por una pareja", ha reivindicado. En esta nueva realidad, aunque sea la de antes de conocerle, ya no tiene cabida Íñigo Onieva: "La verdad es que no mantengo ningún tipo de relación con Íñigo por prescripción facultativa, que la llevo a rajatabla".
Tamara Falcó, que siempre ha defendido las "segundas oportunidades", ha explicado en este evento que con su último novio le es imposible. "Creo que al final se han dado unas circunstancias… A día de hoy estoy bien sola, solo pienso en mi futuro", ha planteado. Además, ante la presión que se ejerce sobre las mujeres famosas por encontrar pareja tras una separación, la marquesa de Griñón ha prometido no tener miedo a quedarse soltera, ya que "solo también se está fenomenal".
Un pensamiento que también tiene presente al pensar en ampliar la familia, algo que tampoco le quita el sueño. "No me preocupa la llamada de la maternidad. Me encantan los niños, pero son fruto del amor. Me gustaría compartirlo con alguien, no siento la suficiente necesidad. Yo con mis sobrinos estoy encantada. Si no es en pareja, no tendría hijos", ha dejado claro.