Cuando ya parecía que la temporada veraniega sería tranquila, en lo que a la crónica social se refiere, entre bodas y posados veraniegos, una noticia ha puesto patas arriba el mundo del corazón. Álvaro Morata y Alice Campello han roto su relación sentimental tras ocho años juntos y cuatro hijos en común, pasando a ser protagonistas absolutos del papel cuché desde que se supiera de su separación en la mañana del lunes. Una noticia sorprendente, a tenor de lo último que habíamos visto y sabido de su historia de amor en las pasadas semanas. Repasamos qué ha sucedido realmente en pleno maremágnum de informaciones, rumores y versiones, y cuáles han sido los movimientos de ambos en estos días.
Tanto durante la pasada Eurocopa, en la que el futbolista y el resto de la selección se alzaron como ganadores, como en las posteriores vacaciones familiares, la sintonía de la pareja era aparentemente total. Alice apoyó a Álvaro públicamente frente a las críticas y viajó en más de una ocasión a Alemania, donde se celebraba el torneo, para apoyar a su marido, en compañía de Alessandro, Leonardo, Edoardo y Bella, sus cuatro hijos. Las imágenes del delantero corriendo a besar a la influencer en la grada nada más terminar el partido de la final, se hicieron, de hecho, virales.
Y la misma sensación trasmitieron las publicaciones de ambos durante el viaje a Cerdeña para celebrar el título y disfrutar de unos días de descanso y desconexión, en los que coincidieron con Mariano Di Vaio, su mujer y sus hijos, todos ellos amigos íntimos del matrimonio. Los posados de Morata y Campello en solitario o junto a los niños, seguían la línea habitual de lo mostrado por la familia en Instagram. Hubo incluso besos, declaraciones y momentos de complicidad. "El amor de mi vida", le dedicó ella a él. La última imagen pública juntos data de hace dos días, todavía en la isla italiana.
Pasaron los días y la actividad digital continuó. La de ella, mostrando imágenes junto a su madre y sus hijos. La de él, promocionando su reciente fichaje por el AC Milan, aunque sí aparecieron juntos en una cena con los Beckham. En la presentación con el club italiano no se vio a Alice, y él no llevaba su anillo de compromiso. Preguntada por su ausencia, la influencer hablaba de los planes de futuro familiares, horas antes de que confirmasen su ruptura. "Con cuatro niños es demasiado complicado con una mudanza de por medio y la búsqueda de una casa", se excusaba.
Además, la pareja no acudió a la boda de uno de los grandes amigos del madrileño, el también futbolista Paulo Dybala con Oriana Sabatini. La empresaria explicó en redes que la ausencia tenía que ver con el reciente robo que habían sufrido y el tiempo que Morata había pasado sin su prole. "No nos parecía bien dejarlos solos", aseguraba.
El fin de semana las especulaciones se dispararon cuando se comprobó que la veneciana había cambiado su foto de perfil por una en solitario, y había quitado el apellido Morata de su nombre completo en su descripción, eliminando una imagen familiar reciente de su muro. Tras redoblarse el runrún de rumores, llegando incluso a hablarse de una posible infidelidad del deportista, la influencer empezaba a pronunciarse en su defensa al contestar comentarios en Instagram. "Estoy asombrada por la cantidad de mentiras que están diciendo", admitía.
Horas más tarde, en la mañana del lunes, la historia dio un giro con la publicación de un comunicado por parte del futbolista en sus historias de Instagram confirmando por primera vez la separación, con buenas palabras hacia su mujer y pidiendo respeto, señalando como motivo del fin de su historia de amor, que se prolongaba desde 2016, una serie de ·incomprensiones· que acabaron desgastando a la pareja. Minutos después, ella hacía lo propio, con un texto muy similar en fondo y forma. Según TardeAR, el comunicado de él se habría publicado sin conocimiento por parte de ella.
La espiral de informaciones con respecto a su situación sentimental no se detendría con las palabras de los protagonistas, lo que acabaría que Campello volviese a pronunciarse con un segundo y un tercer texto. La italiana volvía a negar que se hubiesen producido faltas de respeto entre ellos, ni que hubiese habido, diciéndolo de forma explícita, terceras personas.
El último de sus comunicados vía redes daba cuenta de un cierto hartazgo. "Si las hubiese no daría la cara tantas veces por él ni nunca hablaría así de él. Aportaba, además, reveladora información sobre la decisión de comunicar la ruptura: "En este momento necesitábamos distancia y desafortunadamente, de forma estúpida (y con mucha inmadurez), lo hemos dicho antes de lo debido".
Paralelamente, Morata volvía a pronunciarse también vía historias de Instagram, tras especularse con la existencia de unas supuestas fotografías en las que aparecería en compañía de una mujer. Motivo para que acabase de estallar, asegurando que se trata de informaciones falsas y exigiendo rectificaciones para no emprender acciones legales por dañar su honor. Poco después, el futbolista acababa por borrar ese último texto de sus redes. Lo mismo haría la influencer con respecto a su última intervención. En las últimas horas, también, Alexia Rivas ha asegurado que el delantero salió de fiesta tras confirmar a su entorno que el matrimonio estaba roto.