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Si hay una pareja sorpresa en este singular año – exceptuando a Enrique Ponce y Ana Soria - esos son Ana de Armas y Ben Affleck. Hace cinco meses salía a la luz la noticia de su romance, tras ser captados por las cámaras en sus primeras vacaciones como pareja a Cuba, y desde ese preciso momento no se han separado. La pareja ha sido fotografiada en infinidad de ocasiones por las calles de Los Ángeles, compartiendo muestras de cariño en público. La hispano-cubana, que le tocaba vivir su cumpleaños en pleno confinamiento, no estaba dispuesta a que su novio soplara las velas en unas circunstancias similares, dándole por su 48 aniversario un regalo muy especial.
La actriz ha acudido a un concesionario para adquirir una moto BMW totalmente personalizada, según apunta la revista 'People'. Un detalle que habría hecho especial ilusión al actor, que decidía arrancar su regalo junto a Ana –ambos con cascos a conjunto en verde metalizado- para estrenarla por las calles de su ciudad. La intérprete saludaba a los fotógrafos allí presentes levantando sus manos y haciendo el signo de la victoria con sus dedos, sintiendo la adrenalina del momento y reflejando con este acto la etapa tan dulce que está compartiendo con el protagonista de ‘Perdida’.
A este obsequio habría que añadir la alegría de la llegada de un nuevo miembro a su familia. Si hay algo que la pareja más perseguida de Hollywood comparte es su devoción por los animales. La mayoría de ocasiones que han sido pillados por los paparazzis juntos ha sido cuando se encontraban paseando a sus mascotas. Ana daba la bienvenida a finales del mes de julio, a través de su Instagram, a Salsa, un cachorro que parece ser un cruce de Ihasa Apso. Un nombre que podría tener vinculación con el viaje que realizaron a la tierra natal de ella, cuna de este género musical.
Hace tan solo unos días la polémica saltaba a los medios, el próximo mes de noviembre el nuevo trabajo de Ana de Armas podría ver finalmente la luz. La intérprete se convertirá en una ‘chica Bond’, al meterse en la piel de una agente de la CIA en la nueva película del agente más famoso del cine, 007. Un estreno que se ha visto aplazado en diversas ocasiones, debido a la crisis sanitarias, y cuyos productores no están dispuestos a que su premiere se vea emborronada por el romance de la actriz. Según publica el diario ‘The Sun’, Ben tendría prohibida su asistencia a la primera proyección del film. Habrá que esperar para ver si finalmente esto sucede así o, por el contario, ambos posan en el photocall para los medios allí presentes.
Los rumores de su posible relación saltaron a la prensa a principios del mes de marzo, después de la gran conexión que habían compartido en el rodaje de la película ‘Deep water’. Unas suposiciones que tuvieron su confirmación cuando ambos decidían hacer las maletas y trasladarse a Cuba, donde descansaban de las grabaciones. A pesar de que fueron pillados compartiendo gestos cómplices, la confirmación por parte de ellos no llegaría hasta el mes de abril, cuando Ana publicaba una fotografía donde festejaba su particular cumpleaños junto a él entre globos
La crisis de la COVID ha hecho que la actriz comparta muchos momentos con la familia de Ben, con la que ha demostrado conectar rápidamente. Los hijos que comparte el actor con Jennifer Garner -Violet, de 14 años, Serpahina de 11 y Samuel, de 8- han realizado ya planes junto a ambos: desde pasear a los perros, hacer compras familiares o realizar una escapada a Georgia, donde conoció a la madre de su novio, Christinne Affleck.